Hoy os traigo una revisión a fondo de la Squier Affinity Telecaster. Se trata de una guitarra de gama baja-media, cuyo precio en internet ronda los 180 euros. Se ofrece en seis colores diferentes, aunque todos ellos en combinación con un diapasón de arce, no hay opción a uno de palisandro. El color de la guitarra de este artículo es el sunburst de dos colores.
Acabado
Esta guitarra tiene cuerpo de aliso (en mi caso es de tres piezas) y mástil y diapasón de arce, todos con acabado en poliuretano, brillante para el cuerpo y mate para el mástil y el diapasón. El cuerpo es sólido, sin ningún tipo de rebaje en las zonas de apoyo, y su acabado me parece bastante correcto, es de buena calidad y muy resistente, la guitarra se ha llevado varios golpes fuertes y lo único que tiene son pequeños picotazos que solo se ven si te fijas, pero ningún desconchón en la pintura ni nada por el estilo. Tampoco se raya con facilidad.
El golpeador es blanco, con 8 tornillos, y la calidad del plástico me parece mejorable, así como el hecho de tener una sola capa en lugar de 3.
El acabado del mástil me parece el punto más flojo de toda la guitarra, quizá es algo más plasticoso y el tacto no tan bueno, pero cumple perfectamente. Su perfil es en C, tiene 21 trastes medium jumbo y el radio del diapasón es 9.5". La escala es normal (648mm). La pala tiene la forma clásica de la Telecaster, con el logo de Squier en negro.
La guitarra es bastante ligera en comparación con las Telecaster auténticas, pesa solamente alrededor de 3,5 kg, a pesar de no tener rebajes en el cuerpo y de tener solamente los huecos estrictamente necesarios para las pastillas y la electrónica. El mástil va atornillado al cuerpo, y en la placa hay una inscripción con el logotipo de Squier:
Electrónica y hardware
El hardware de esta guitarra es todo estándar, tanto el clavijero como el puente. Este último tiene 6 selletas independientes, se fija al cuerpo con 5 tornillos y es plano, no tiene los bordes elevados. El detalle que menos me gusta es que las cuerdas van ancladas en el puente, no a través del cuerpo, pero a una guitarra de este precio no le podemos pedir más, y de todas formas el puente cumple a la perfección y se deja quintar sin problema. A pesar de ser muy básico, todo cumple bien y la afinación se mantiene.
También tiene la electrónica estándar de las Telecaster: selector de 3 posiciones, un control de volumen y uno de tono. Los botones son cromados, de estilo "dome", y van sujetos mediante un tornillo de cabeza hexagonal que tendremos que estar apretando a menudo porque se afloja con facilidad. El selector de 3 posiciones también es básico, y tiene las ocho patillas en línea. El botón del selector es negro, de tipo sombrero. Si por alguna razón queremos cambiar el selector por uno tradicional (circular y con las patillas en disposición 4+4) nos dará algún dolor de cabeza: en el selector de serie los agujeros de los tornillos son más pequeños y la punta del interruptor más estrecha, por lo que tendremos que buscarnos unos tornillos apropiados (o bien agrandar los agujeros de la placa metálica) y un botón más ancho para la punta. Esta es la razón por la que en la siguiente imagen el interruptor aparezca sin botón, pues he puesto un selector nuevo y estoy buscando un botón ancho que quepa. Los potenciómetros funcionan correctamente y el selector también, aunque está un poco duro no hace ningún tipo de ruido al cambiar de pastillas. El jack va sujeto con una placa de plástico negro que tiende a rajarse fácilmente en cuanto recibe algún golpe, por lo que yo no descartaría la compra de una metálica en sustitución.
Sonido
La guitarra va equipada con dos pastillas single coil bastante sencillas. La del mástil, en lugar de estar atornillada al golpeador, lo está directamente a la madera del cuerpo. Es importante el detalle de los huecos de la madera; su tamaño y forma es exactamente lo justo para alojar las pastillas de serie, así que si queremos poner una humbucker irremediablemente tendremos que ampliar el hueco. A pesar de no venir apantallada no hace mucho ruido, así que yo todavía no tengo en mente apantallarla.
La pastilla del puente da un sonido potente y chillón, mientras que la del mástil tiene un sonido más grueso y oscuro. El sonido de la del puente es de una calidad más que aceptable y suena a Telecaster, pero la del mástil se pasa de oscura y tiene un sonido que tira más a seco. Por esta razón no veo descabellado un cambio de pastillas, por supuesto no merece la pena gastarse 100 euros en pastillas Seymour Duncan o similares en una guitarra de estas características, pero en internet se suelen encontrar ofertas de juegos de pastillas procedentes de Fender Telecaster mexicanas o japonesas a precios asequibles (entre 30-50 euros) que pueden mejorar bastante la guitarra. Yo he cambiado recientemente las pastillas de serie por unas procedentes de una Telecaster mexicana y la mejora ha sido notable.
Conclusión
En este rango de precio sinceramente es lo mejor que vamos a encontrar, obviamente no estamos hablando de una guitarra de gama alta ni media, pero por calidad de acabado y sonido es similar, por ejemplo, a la Yamaha Pacifica 112, que cuesta alrededor de 220 euros. Tiene lo que se busca en una Telecaster, tanto su feeling como su sonido, por esta razón la recomiendo a todos aquellos que busquen una segunda guitarra de calidad aceptable, barata y que además sea una buena Telecaster, sobre todo después de un cambio de pastillas como el que he citado anteriormente. Una vez ajustada y tras un cambio de cuerdas (trae de serie unas Fender de calibres .009-.042 que no me parecen demasiado buenas), se deja tocar perfectamente. Yo la uso en mi grupo de funk rock junto con mi Stratocaster y está a la altura.
Para principiantes también es recomendable, puesto que es una guitarra que es barata para empezar pero debido a su calidad y sus posibilidades de mejora puede durar muchos años, además de ser muy cómoda de tocar y de ajustarse fácilmente. Sin embargo, al ser una Telecaster, para principiantes yo veo mejor la Affinity Stratocaster, que es igual en calidad y precio pero es más versátil y se adapta mejor a todos los estilos; esto ya es cuestión de gustos y de preferencias.
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